TEODORO GONZÁLEZ DE LEÓN
EN EL PROYECTO DE LA UPN

UPN Ajusco

El Arquitecto Teodoro González de León construyó (en colaboración con Abraham Zabludovsky) entre 1979 y 1982 el edificio de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN). Forma parte con Fernando Solana Morales y Miguel Limón Rojas, de los tres constructores estelares del Proyecto Fundador.

En el edificio de la UPN se distinguen los elementos característicos de la obra de González de León: la monumentalidad, el pórtico, el sistema de circulación calle peatonal – patios - escaleras- pasillos – puentes- articulados en torno de un patio central, parteluces – columnas, cilindros gigantes, taludes, superficies rugosas de concreto martillado.
El habitar continuo de la Pedagógica forma identidades cotidianas de académicos, estudiantes y trabajadores: encarna la interpretación abstracta del arquitecto.

QUETZALCÓATL DE TEZONTLE Y MÁRMOL
MITO FUNDACIONAL

Al proyectar un edificio --escribió González de León- el arquitecto hace una representación abstracta de la institución, inventa el mito que la representa: ¿Existió la idea de un mito fundador para el edificio de la UPN? Algunos elementos podrían sustentar esta hipótesis. 

El presidente López Portillo era admirador del mito de Quetzalcóatl, la idea civilizatoria precolombina. Publicó más de un texto con el tema; “Don Q”, es la figura literaria donde encarna la misión redentora y trágica de la deidad; su casa del pedregal de San Ángel lucía en la barda exterior una serpiente emplumada formada con piedras coloreadas. 

El trazo de los dos edificios gemelos de 250 metros de longitud comienza en el norte, zigzaguea en dos ocasiones para dar la cara a la salida del sol, esta es la ruta de la partida del dios, la de la profecía de su retorno. El pórtico principal mira hacia Cuicuilco, de reojo vislumbra al cerro ceremonial del Zacatépetl. ¿Este puede ser el mito fundador de la UPN?

(Archivo Fotográfico UPN)

Visitan la obra del Edificio de la UPN en construcción (septiembre de 1980), el Secretario de Educación Fernando Solana, los arquitectos Abraham Zabludovsky y Teodoro González de León, el segundo Rector de la institución, Miguel Huerta Maldonado y el Secretario Académico, Miguel Limón Rojas.

Vista del callejón de acceso desde las escalinatas del Patio Central. Es uno de los grandes vados del edificio. El callejón abre el espacio interno a la circulación libre con el entorno urbano. En el fondo el cerro de Zacatépetl (cerro del zacate) de valor histórico y antropológico para la zona de los pedregales de la Ciudad de México donde se ubica la Pedagógica. (Archivo fotográfico UPN)

El pórtico de la Universidad con emblema y el nombre, de vista hacia el oriente. Es el lugar donde el visitante recibe la primera imagen, la bienvenida. Es uno de los elementos fundamentales en la expresión arquitectónica de González de León.

Escrito por: Juan Manuel Delgado Reynoso UPN, Ajusco, Septiembre de 2016

¿Quién fue Gregorio Torres Quintero?

Biografía

Fue uno de los grandes impulsores de la educación primaria en México. Su vocación de maestro se puso de manifiesto desde temprana edad, por lo que después de realizar los primeros estudios en su ciudad natal llegó a la capital de la República con la ilusión de abrazar la carrera magisterial.
Fue becado por el gobierno de Colima para estudiar en la Escuela Nacional de Maestros de la que se graduó en 1891 iniciando con ello una brillante trayectoria como docente y funcionario educativo. Llegó a ser jefe de la sección de Educación y Beneficencia de la Secretará de Gobierno del Estado de Colima e Inspector General de Educación. Fue el creador de la ley de Instrucción Pública y crítico incansable de los libros de texto como sustituto del maestro, pues siempre creyó que la imagen del docente era fundamental en la tarea educativa.
Fue el creador del método onomatopéyico para la enseñanza de la lectoescritura que sigue vigente hoy en día y se basa en los sonidos naturales para conocer las letras, sílabas y palabras. Es autor de Cuentos colimotes, Descripciones y Cuentos sucedidos, pero su mayor aportación a la cultura nacional ha sido su obra pedagógica donde describió nuevas metodologías para facilitar el trabajo del maestro en el aula. Especial mención merecen sus textos La Patria Mexicana y Elementos de Historia Nacional en donde mostró nuevas formas de enseñar la historia.
Estuvo en contra de que en la escuela primaria se enseñara una historia filosófica y se redujera a concentrar datos, fechas y batallas para su memorización. En cambio propuso una historia-cuento en la cual la narrativa estimula agradablemente el interés de los educandos, que no deben ser considerados como adultos, por lo que también debe existir una graduación de la información. Gregorio Torres Quintero afimaba: "¿Saben por qué muchas personas se duermen durante las funciones de ópera? porque no se les muestra con interés los tópicos de la obra. Lo mismo sucede con la enseñanza de la historia y los libros no se acomodan al estado espiritual de los receptores. Esto último se logra con cuentos, relatos y narraciones, todo ello animado, dramatizado, atractivo y bello". El gobierno de Colima lo nombró hijo distinguido. Murió en la ciudad de México en 1934.